
Piel mixta: ni tan seca, ni tan grasa. Solo desbalanceada
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¿Por qué tu piel mixta necesita equilibrio?
Hablemos de cómo cuidar una piel con zonas grasas y zonas secas
La piel mixta es una de las más comunes, pero también una de las más confusas de cuidar. Si sentís que algunas partes de tu rostro, como la frente, la nariz o el mentón, se ponen brillosas durante el día, mientras que otras se sienten tirantes o resecas… te entiendo completamente. Esa combinación de características es típica de una piel mixta, y muchas veces lo que realmente necesita no es más productos, sino más equilibrio.
¿Qué significa tener la piel mixta?
Cuando hablamos de piel mixta, nos referimos a ese tipo de piel que tiene zonas grasas (generalmente la zona T) y zonas más secas o deshidratadas (como las mejillas). Y lo complicado es que muchas veces intentamos tratarla como si fuera una piel grasa, y ahí es donde empieza el problema.
La verdad es que la piel mixta necesita una rutina que respete sus diferencias y que ayude a equilibrarla, sin exagerar con ingredientes agresivos ni dejarla sin hidratación.
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¿Por qué se produce ese desbalance?
En mi experiencia como cosmetóloga, he visto que muchas pieles mixtas terminan aún más desequilibradas por el uso de productos incorrectos. Algunos de los factores que pueden causar ese desbalance son:
- Limpiadores muy fuertes que resecan demasiado.
- Saltarse la hidratación por miedo a “engrasar” más la piel.
- Cambios hormonales, clima o estrés.
- Y por supuesto, rutinas que no están diseñadas para tratar tanto la oleosidad como la deshidratación.
Cuando esto pasa, la piel reacciona: produce más grasa para protegerse y, al mismo tiempo, se deshidrata. El resultado es una piel que se siente confusa, reactiva y poco cómoda.
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Lo que necesita tu piel es una rutina gentil y balanceada
Si tenés piel mixta, lo mejor que podés hacer es buscar una rutina sencilla, pero con ingredientes funcionales que trabajen en armonía:
- Que regulen el exceso de grasa.
- Que aporten hidratación sin dejar sensación pesada.
- Y que ayuden a fortalecer tu barrera cutánea, para que tu piel esté más estable todos los días.
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La rutina que yo recomiendo para piel mixta: el Kit Balance de Bloomie
Diseñé esta rutina pensando en todo lo que una piel mixta necesita para sentirse cómoda, saludable y equilibrada. El Kit Balance tiene tres pasos súper fáciles de seguir:
1. Espuma Facial (con niacinamida, pantenol y ácido hialurónico)
Limpia de forma suave pero efectiva, eliminando impurezas sin resecar la piel. Es ideal para usar mañana y noche sin sentir tirantez después.
2. Serum Oil Control (con niacinamida, té verde, centella asiática y ácido hialurónico)
Este serum ayuda a controlar el brillo en la zona T, pero también calma e hidrata. Es liviano, no deja sensación pegajosa, y se absorbe rapidísimo.
3. Crema Skin Barrier Repair (con ceramidas, pantenol y ácido hialurónico)
Una hidratación que se siente ligera pero efectiva. Aporta confort a las zonas secas, sin dejar brillo extra donde no lo querés. Además, fortalece la barrera de la piel, que es clave para mantener el equilibrio a largo plazo.
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Balancear tu piel es posible (y mucho más fácil de lo que parece)
A veces sentimos que cuidar la piel mixta es complicado, pero cuando usás los productos adecuados, todo empieza a fluir. Esta rutina fue pensada con mucho cariño para ayudarte a sentir tu piel más estable, más fresca y más feliz.
Podés encontrar el Kit Balance en la tienda online de Bloomie.
Es perfecto para usar tanto en la mañana como en la noche, y es una de mis rutinas favoritas para pieles mixtas que buscan ese punto medio entre hidratación y control de brillo.
Nos leemos en el próximo blog✨
-Esme